13 febrero 2020

La importancia de educar en Naturaleza


El Cortijo de Frías, se caracteriza por estar dentro de la red del club de ecoturismo de España. Preocupado por el cuidado de la naturaleza y de enseñar a nuestros menores toda la biodiversidad que engloba el Parque natural de las Sierras Subbéticas y como debemos de cuidar la misma.

Para ello, el Cortijo de Frias se podría englobar dentro de las denominadas «granjas escuelas». Una de sus principales funciones es educar sobre el medio ambiente y la biodiversidad de la zona. Además posee en su recinto una granja con abundantes animales vivos a los que los alumnos podrán cuidar y aprender sobre ellos.

La granja escuela permite que los niños/as vivan la naturaleza y no solo la conozcan a través de imágenes o explicaciones. Absorbiendo toda la información que está a su alrededor como esponjas. Por ello, podemos señalar varias ventajas directas de las granjas escuelas:

  1. Mejora su salud. Al encontrarse en espacios abiertos estos son buenos para mejorar el estado de ánimo y la salud. Esto les permitirá recargar las pilas. Además, el contacto directo con la tierra, el aire puro y los animales también ayuda a mejorar sus defensas.
  2. Potencia el desarrollo motor. Las actividades en la naturaleza les ayudan a mejorar sus habilidades motrices. También aprenden a lidiar con la frustración porque en este entorno hay muchos elementos que no pueden controlar (clima, elementos externos…).
  3. Fomenta el desarrollo cognitivo. El contacto con la naturaleza incide directamente en el desarrollo de las conexiones neuronales en el cerebro. La visita a una granja escuela favorece el desarrollo intelectual y el aprendizaje cognitivo. Aprenden mejor y más rápido al estar en contacto con los animales y las plantas.
  4. Desarrolla sus habilidades sociales. Salir de su entorno más cercano y relacionarse con otras personas les ayudará a mejorar la comunicación, el trabajo en equipo o la convivencia.  También les ayudará a sentirse uno más dentro del mundo, lo que es fundamental para su desarrollo como personas.
  5. Potencia su creatividad. Los pequeños pueden realizar una gran variedad de actividades que los estimulan para que pongan en marcha su creatividad y su capacidad para explorar e investigar el mundo que les rodea.
  6. Crea conciencia ambiental. Conocer de cerca la naturaleza les ayuda a sensibilizarse con el medio ambiente, comprendiendo la importancia de tener comportamientos sostenibles. Además, toman conciencia de la responsabilidad que conlleva el cuidado de animales y a través de la empatía aprenden a respetarlos.
  7. Estimula su autonomía personal. Poder hacer cosas por sí mismos y tomar la iniciativa les ayuda a ganar seguridad e independencia y a perder el miedo para crecer como personas.

La visita a una granja escuela es apropiada para niños/as y adultos de cualquier edad. Antes de los seis años les ayuda a la exploración sensorial y el control del movimiento, mejorando su autocontrol, su capacidad de enfocar la atención y el respeto. Entre los seis y los doce años, la naturaleza les permite aprender a relacionar, observar, pensar de forma razonada y sentirse bien con ellos mismos; mientras que durante la adolescencia les ayuda a fomentar la responsabilidad, la libertad, la autonomía o la seguridad.

Independientemente de la edad que tengan tus hijos, visitar una granja escuela puede convertirse en una experiencia original e inolvidable en la que la naturaleza se convierte en un parque de atracciones y un aula de aprendizaje. ¿Has visitado alguna con tus pequeños? ¿Cómo ha sido la experiencia?