20 febrero 2020

La importancia de cómo educar

Estamos cada vez más acostumbrados a que a diario veamos como cambian el mundo a nuestro alrededor. Cambios con grandes avances en la tecnología hasta el punto de que en menos de 15 años hemos pasado de tener que llamar a una persona solamente cuando se encuentra en casa a estar en continua comunicación con videollamadas estemos donde estemos.

Este es solamente un ejemplo de los muchos que podemos nombrar para maravillarnos de como avanza la tecnología a pasos agigantados hoy en día. Y aunque esto no ocurre solo en la tecnología, cuando hablamos de educar seguimos en la prehistoria y siempre a remolque de la sociedad. Y no nos referimos a educar en «temas» modernos ni a realizar metodologías completamente nuevas y diferentes.

Nos estamos refiriendo a actualizar y adaptarnos a los tiempos que corren introduciendo la educación en la vida cotidiana y no al contrario. Por eso, tratamos aquí de explicar nuestra metodología aplicada a los momentos de actividades más educativas. Como son las clases de robótica, impresión en 3D o programación.

Es importante comprender que en todo momento no hay que estar innovando, sino que cada unidad o bloque debe solicitar una metodología diferente para no introducir algo tan disruptivo para los alumnos que no sea provechoso para ellos. En algunos casos se puede requerir de una metodología diferente, así como por ejemplo en algunas unidades se debe de usar una metodología más tradicional en la que el profesor indique los pasos a seguir y los alumnos los sigan paso a paso, pues es necesario seguir las instrucciones para realizarla correctamente, en la gran mayoría restante el profesor podrá implementar metodologías más actuales. Nosotros proponemos utilizar una metodología basada en proyectos (ABP) para fomentar el trabajo en equipo y la capacidad de aprender a aprender.

En nuestro planteamiento de ABP los alumnos se sitúan en el centro de la acción educativa. Teniendo que resolver situaciones a través de su conocimiento, recursos, investigación y reflexión. El trabajo cooperativo es imprescindible, potenciando habilidades y destrezas claves para la vida adulta, así como competencias sociales, lingüísticas y comunicativas.

El uso de ABP para nuestra intervención es idóneo. Se cumplen casi todos los principios en los que se basan las ABP. Además los ABP no tienen una única solución, la respuesta es abierta, al igual que los caminos seguidos para alcanzar los objetivos finales. La búsqueda activa de información, así como su comprensión crítica, resultan fundamentales, en un proceso continuo de reflexión y evaluación.

También podemos usar el Aprendizaje Basado en la Resolución de Problemas, que es un subtipo dentro de Aprendizaje Basado en Proyectos.

En todo caso, como estas actividades suelen ser algo novedoso para los alumnos debemos tener cuidado. La aplicación de ABP debe de aplicarse a partir de unos puntos de partida. Inicialmente se mostrará como se usa la tecnología apropiada de cada unidad. Dando unas pautas a los alumnos se procederá al planteamiento de un “reto”, “problema” o “proyecto”. Los alumnos usaran por si solos los conceptos vistos y los que se le ocurran para resolver estos planteamientos. De esta forma se desarrolla la capacidad de aprender a aprender.

A la hora de realizar las actividades se realizaran de manera que sea un proceso activo. Para que el alumno sea capaz de comprender y analizar, a la vez que con ello adquiera los conocimientos adecuados y sea capaz de reproducirlo y aplicarlo en nuevos problemas planteados. De esta forma fomentaremos el pensamiento crítico y la capacidad de aprender a aprender.

La mayor parte de los problemas que se van a plantear tienen multitud de soluciones. Todas ellas validas aunque no todas tienen un rendimiento óptimo en cuanto a programación se refiere. De modo que se les debe hacer ver que no es un error pero tampoco es correcto. Hay que entender que hay formas más eficientes que otras a la hora de resolver los problemas. Para una realización más cómoda y rápida a la hora de realizar cada sesión, estas estarán divididas en dos partes. Una inicial, formada por varias etapa en las que se realiza un ejemplo práctico por parte del profesor y realiza su explicación. Otra en la que los propios alumnos intentan realizar o resolver problemas dividiéndolos en grupos.

Los trabajos se realizarán en pequeño grupos reducidos lo que les va a dar la capacidad de razonar y relacionarse socialmente. El motivo por el que el grupo sea un grupo reducido es para evitar las grandes discordias y los problemas de aislamiento. Al ser reducidos es más fácil la intervención sobre los mismos. Podemos hablar también de la aplicación de una metodología de Aprendizaje Cooperativo.

Esta metodología de Aprendizaje Cooperativo también es un buen método de integración dentro del aula, pudiéndose aplicar modelos de integración si fuese el caso.

Esta es nuestra filosofía de trabajo y nuestro modo de ver la educación. Intentando estar siempre actualizados y centrando la educación en el niño/a y la realidad social que lo rodea. Para fomentar, de este modo, la ilusión y las ganas de aprender como valor primordial para los niños/as.